San Beda el Venerable. 1902. James Doyle Penrose
Óleo sobre lienzo.
Real Academia. Londres
Celebramos hoy la memoria de Beda el Venerable. Casi todo lo que se conoce sobre su vida se encuentra en un anexo añadido por él en su Historia ecclesiastica. Completó la obra en 731 y dice que entonces se encontraba en su 59º año de vida, lo que da una fecha probable de nacimiento en 672-673. También dice que nació en las tierras de este monasterio.
En su obra cuenta que fue enviado voluntariamente al monasterio de Monkwearmouth a los 7 años de edad y que se convirtió en diácono a los 19 y en sacerdote a los 30. No está clara su ascendencia noble. Fue instruido por los abades Benedict Biscop y Ceolfrid, y posiblemente acompañase a este último a Jarrow en 682. Cuando una plaga azotó Jarrow en 686 murieron todos los monjes y clérigos que había en el lugar, con la excepción de Beda y el abad, ellos fueron los encargados de los servicios religiosos de la comunidad durante varios años.1 Allí pasó su vida, siempre ocupado aprendiendo, enseñando o escribiendo, siempre celoso con sus obligaciones monásticas. Allí murió y fue enterrado, pero sus huesos fueron trasladados a la Catedral de Durham en el siglo XI, en donde fueron depositados en una urna de oro y plata; sin embargo en 1541 la urna fue robada, y los restos de Beda se perdieron.
Beda llegó a ser conocido como Beda el Venerable al poco de morir, pero esto no fue tomado en consideración por la Iglesia católica para su canonización. Su erudición e importancia para el Catolicismo fueron reconocidas en 1899 cuando fue declarado Doctor de la Iglesia reconociéndolo como San Beda el Venerable.
Una cruz de gran tamaño fue erguida en su honor en Rocker Point, cerca de Jarrow en 1904. En 2013, el papa Francisco eligió un fragmento de una de sus homilías para su escudo: Miserando atque eligendo (Lo miró con misericordia y lo eligió).
No hay comentarios:
Publicar un comentario